El marketing, hoy, se llama marQUIMting
¿Por que?
Es un secreto a voces que, con la evolución tecnológica, hemos vuelto a un mercado de oferta, más o menos como cuando nació el marketing.
Otra vez las empresas vuelven a interesarse por el Cliente, algo que no deberían haber olvidado nunca.
Eso sí, por el camino nos hemos inventado el marketing industrial, el farmacéutico, el bancario,… el marketing directo y ya, para redondear, el marketing digital, con la vana pretensión de convertir una herramienta (potente, muy potente, pero: HERRAMIENTA) en «la» solución de un problema de Gestión, el mismo problema de Gestión de toda la vida «Si no sabes donde vas, ningún viento te llevará a puerto»
Y nos hemos aprendido unas cuantas «palabrejas» para tratar de hacerlo todo como muy serio.
Pero seguimos pidiendo una “campaña de marketing” como si eso del marketing pudiera comprarse a kilos, le ponemos en la tarjeta al que lleva la publicidad “director de marketing” como si ese personaje tuviera capacidad de decisión sobre el precio o el embalaje o los descuentos a mayorista, etc. y cuando vemos los anuncios de IKEA, decimos que hacen un “marketing muy agresivo” confundiendo, una vez más, la publicidad con el marketing.
Pero… nos hemos olvidado del Cliente, por mucho que hablemos de la experiencia de cliente. Seguimos fabricando lo que pretendemos saber que los clientes desearán y competimos con otros que fabrican… lo mismo, todos esperando que el cliente nos prefiera, por eso encargamos campañas publicitarias «agresivas» aun que bordeen la legalidad.
Pues eso es lo que tratamos de solucionar con nuestra filosofía reflejada en el libro (exclusivo) «MARQUIMTING: La Gestión Empresarial con Sentido Común» porqué, realmente, el único problema de la Empresa está en la Gestión con visión de Cliente, algo de lo que muchos hablan, sobre todo ahora que se ha puesto de moda la «experiencia de cliente» una banalidad porqué, como decía SEARS y después lo continuó EL CORTE INGLES: Satisfacción garantizada o devolvemos su dinero, es decir véndame algo que me interese porqué si me engaña no volveré a mirarle la cara.
Siendo tan obvio parece mentira que sobre tal banalidad construyamos una teoría empresarial.
En marquimting recuperamos para el marketing su valor como filosofía de gestión, algo que compete a la Alta Dirección y no aceptamos que su nombre quede polarizado en la publicidad y el conjunto de técnicas de comunicación e impulsión, mucho menos que se encasille en el uso de las nuevas tecnologías que, ni lo resuelven todo ni son las únicas herramientas para una buena gestión empresarial.
Lo que hace falta es talento y constancia.
Talento, visión de negocio, sensibilidad para captar nuevas oportunidades, creatividad… características de emprendedor, de empresario, de líder, de gestor; que pueden ser innatas o pueden construirse con las metodologías adecuadas.
Constancia en el empleo de herramientas de gestión que orienten, sitúen y conduzcan a las mejores decisiones. Trabajando con información fidedigna o supuesta pero siempre cuantificada, para poder ser compartida, corregida y acercarse, cada día más, a la realidad
marquimting es la Gestión Empresarial con el acento puesto en el cliente; es una reflexión, un instrumento para repensar lo que estamos haciendo, unos modelos de simulación para centrar las decisiones, un regreso al futuro y una simplificación para hacer fácil la formación permanente.
Hay cuatro momentos clave sobre los que debemos poner nuestra más completa atención, son cuando el cliente COMPRA, cuando PAGA, cuando USA y cuando HABLA.
De todo eso hablamos en nuestro libro de cabecera o con usted, persona a persona, si tiene interés en ello.